Equipos: 16
Cuándo: 16 junio 1954 hasta 04 julio 1954
Final: 04 julio 1954
Partidos: 26
Goles: 140 (promedio de 5.4 por partido)
Asistencia: 889500 (promedio de 34211)
Ganador: República Federal de Alemania
Segundo: Hungría
Tercero: Austria
Cuarto: Uruguay
Bota de Oro: Sandor KOCSIS (HUN)
Total de espectadores: 943.000
Cuándo: 16 junio 1954 hasta 04 julio 1954
Final: 04 julio 1954
Partidos: 26
Goles: 140 (promedio de 5.4 por partido)
Asistencia: 889500 (promedio de 34211)
Ganador: República Federal de Alemania
Segundo: Hungría
Tercero: Austria
Cuarto: Uruguay
Bota de Oro: Sandor KOCSIS (HUN)
Total de espectadores: 943.000
Contexto: Gelsomina y Zampanó brotaban de la mano mágina de Ferllini y se echaban a payasear por La Strada, sin apuro, mientras a toda velocidad Fangio se consagraba campeón mundial de automovilismo por segunda vez. Jonas Salk preparaba la vacuna contra la poliomelitis. En el Pacífico estallaba la primera bomba de hidrógeno. En Vietnam, el general Giap noqueaba el ejército francés en la fulminante batalla de Dien Bien Phu. En Argelia, otra colonia francesa, nacía la guerra de la independencia. El general Stroessner era elegido presidente del Paraguay, en reñida competencia contra ningún candidato. En Brasil, se estrechaba el cerco de militares y empresario, armas y dineros, contra el presidente Getulio Vargas, que poco después se rompería el corazón de un balazo. Aviones norteamericanos bombardeaban Guatemala con la bendición de la OEA y un ejército fabricado en el norte invadía, mataba y vencía.
Vestimenta: cada jugador tiene un número exclusivo. Resultaba muy extraño y fue muy criticado el hecho de que un arquero luciera el 22 o un delantero el 15. Alemania Federal utilizaba botines con tapones atornillados.
La novedad: aparece la televisión y con ellas las transmisiones televisivas de los partidos de fútbol que produjeron un notable impacto, que se potenció con el tiempo. Millones de personas pudieron ver jugar a su equipo a la distancia.
Sedes: Basilea, Berna, Lausanne, Zurich, Ginebra, Lugano
Estadio Wankdorf: con capacidad para 55.000 personas, fue inaugurado especialmente para el Mundial y tenía una tribuna techada. Sandor Kocsis, tras la derrota en la final dijo “En este césped pesa una maldición extraña contra todo húngaro que lo pise.”
El equipo ideal: Grosics (Hungría); Boszcic (Hungría), Santamarina (Uruguay), Andrade (Uruguay); Varela, F. Walter (Alemania); Hidegkuti (Hungría), Czibor (Hungría), Toth (Hungría), Kocsis (Hungría), Puskas (Hungría).
La figura: Ferenc Puskas, también llamado Pancho o el látigo, era el capitán de Hungría y jugó el mundial siendo el coronel del ejército de su país. Jugó en el Kispeset y Honved y luego dejó sus tierras para vestirse con la del Real Madrid donde ganó tres copas de Europa, una Intercontinental y cinco ligas. Con su selección jugó 84 partidos con 85 goles. Ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Helsink 56. Tras la intervención rusa en Hungría, se exilió en España con cuyo seleccionado participó en tres partidos del Mundial de Chile 62. Se retiró en 1976 a los cuarenta años.
Números: 140 goles en 26 partidos se marcaron. 11 goles marcó Sandor Kocsis, el goleador del torneo. 27 goles la suma total que marcó Hungría, récord para un equipo en un mundial. 8-3 le ganó Hungría a Alemania en la primera ronda, en la final la historia sería otra. 7-5 le ganó Austria a Suiza jugando el partido con más goles en la historia de los mundiales. 5.38 el promedio de gol de todo el torneo y el más alto en la historia de los mundiales.
Curiosidades: Uruguay había jugado dos Mundiales antes del 54 y había ganado ambos, por lo tanto, la primera derrota se la propinó Hungría en la prórroga de las semifinales. Por primera vez en la historia, un grupo lo integraron cuatro países del mismo continente (grupo 4, Suiza, Italia, Inglaterra, Bélgica).
Si bien la selección nacional no participó en clara muestra de enojo de la AFA con la FIFA, envió a Guillermo Stábile, DT de la selección en ese momento para que observe todos los partidos. El entrenador realizó varios apuntes en los que no adhería a la ferviente idea de la táctica de los europeos y prefería las condiciones naturales, que según él, la de los argentinos eran magníficas. Buscaba un equilibrio entre lo útil y lo vistosos. Agregó que Hungría era el mejor aunque no eran fenómenos del fútbol y que si su selección hubiera acudido, habría hecho una tarea destacada.
La copa del mundo tuvo récord de países inscriptos (16 clasificaron, 38 participaron sólo de Eliminatorias) y ya era llamada Jules Rimet. España se quedó afuera de la competición por un misterio que aún no se resolvió. Había empatado en un repechaje con Turquía y debían jugar un tercer partido definitorio. Kubala era la figura de los gallegos, pero era húngaro, entonces un telegrama desde la FIFA (después nunca se supo qué dirigente había sido) prohibió su inclusión en el partido decisivo. Tras el empate 2-2 en estadio neutro, por sorteo clasificaron los euro-asiáticos.
Hungría era el gran candidato y según dicen, de los mejores equipos que se hayan visto alguna vez. Había arrasado en los Juegos Olímpicos de Helsinki y después había humillado a Inglaterra en Wembley. Tácticamente retrasó a su centrodelantero y a su puntero y adelantó a sus volantes (Kocsis, Puskas). Entre los cuatro conformaron el cuadrado mágico. El goleador de la competición, apodado Cabecita de Oro por su fuerte cabezazo gritó 75 veces en 68 partidos.
Le ganó a Corea nueve a cero y en cada gol de los europeos, los orientales inclinaban su cabeza en reverencia a los mejores. Al partido siguiente le ganó 8-3 a Alemania que dando por perdido el partido había puesto cinco suplentes; Ferenc Puskas terminó lesionado y por eso no pudo jugar cuartos y semifinales. En cuartos sin su gran figura, triunfó ante Brasil en la Batalla de Berna, por 4-2 en uno de los partidos más violentos de la historia. Hubo 42 infracciones, 2 penales y 3 expulsiones, los hinchas se enfrentaron con la policía y los jugadores se enfrentaron camino a vestuario a las piñas, aunque no hubo sancionados. Para la semifinal enfrentó a Uruguay en “el más bello espectáculo futbolístico que vieron los tiempos” según dijo The Manchester Guardian. Ganaban los húngaros dos a cero pero, dos goles del argentino Hohberg empataron las acciones y las llevaron a suplementario. Kocsis con un doblete olvidó rápido las aspiraciones sudamericanas y a diferencia del partido anterior, los jugadores terminaron llorando de emoción y felicitándose unos a otros por el gran partido que habían jugado.
Por el otro bando aparecía una humilde Alemania que se recuperaba de la guerra y quería volver a ser un país “normal”. Contaba con Herberger, un jugador experimentado pre-guerra y con gran poder de persuasión, sirviéndoles de ejemplo a sus compañeros, según Glanville analizó en Historia de la Copa del Mundo. Además estaban Walter y Rahn, dos jugadores decisivos en la final. Pasó la primera ronda tras ganar en desempate a Turquía, luego eliminó a Yugoslavia tras ganarle por 2-0 pero merecer claramente perder, según dijeron periodistas. En semifinales vapuleó a Austria con un cómodo 6-1.
Hungría era gran favorita para la final y más cuando a los diez minutos ganaba dos a cero. La pesadez del campo por la lluvia y la ventaja física que pudieron sacar quienes perdían, emparejó las cosas. Morlock descontó y Rahn hizo dos para un final de película. “Nos dormimos y cuando nos despertamos, perdíamos tres a dos” fue la mejor explicación que pudo dar un jugador ante la milagrosa remontada germana. Puskas agregó “fuimos los mejores pero ellos los más inteligentes”. RELACIONADO: Video FIFA 1 - Video FIFA 2 - Más videos - Mundial de Uruguay 1930 - Mundial de Italia 1934 - Mundial de Francia 1938 - Mundial de Brasil 1950 - Curiosidad Mundial 1954
Vestimenta: cada jugador tiene un número exclusivo. Resultaba muy extraño y fue muy criticado el hecho de que un arquero luciera el 22 o un delantero el 15. Alemania Federal utilizaba botines con tapones atornillados.
La novedad: aparece la televisión y con ellas las transmisiones televisivas de los partidos de fútbol que produjeron un notable impacto, que se potenció con el tiempo. Millones de personas pudieron ver jugar a su equipo a la distancia.
Sedes: Basilea, Berna, Lausanne, Zurich, Ginebra, Lugano
Estadio Wankdorf: con capacidad para 55.000 personas, fue inaugurado especialmente para el Mundial y tenía una tribuna techada. Sandor Kocsis, tras la derrota en la final dijo “En este césped pesa una maldición extraña contra todo húngaro que lo pise.”
El equipo ideal: Grosics (Hungría); Boszcic (Hungría), Santamarina (Uruguay), Andrade (Uruguay); Varela, F. Walter (Alemania); Hidegkuti (Hungría), Czibor (Hungría), Toth (Hungría), Kocsis (Hungría), Puskas (Hungría).
La figura: Ferenc Puskas, también llamado Pancho o el látigo, era el capitán de Hungría y jugó el mundial siendo el coronel del ejército de su país. Jugó en el Kispeset y Honved y luego dejó sus tierras para vestirse con la del Real Madrid donde ganó tres copas de Europa, una Intercontinental y cinco ligas. Con su selección jugó 84 partidos con 85 goles. Ganó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Helsink 56. Tras la intervención rusa en Hungría, se exilió en España con cuyo seleccionado participó en tres partidos del Mundial de Chile 62. Se retiró en 1976 a los cuarenta años.
Números: 140 goles en 26 partidos se marcaron. 11 goles marcó Sandor Kocsis, el goleador del torneo. 27 goles la suma total que marcó Hungría, récord para un equipo en un mundial. 8-3 le ganó Hungría a Alemania en la primera ronda, en la final la historia sería otra. 7-5 le ganó Austria a Suiza jugando el partido con más goles en la historia de los mundiales. 5.38 el promedio de gol de todo el torneo y el más alto en la historia de los mundiales.
Curiosidades: Uruguay había jugado dos Mundiales antes del 54 y había ganado ambos, por lo tanto, la primera derrota se la propinó Hungría en la prórroga de las semifinales. Por primera vez en la historia, un grupo lo integraron cuatro países del mismo continente (grupo 4, Suiza, Italia, Inglaterra, Bélgica).
Si bien la selección nacional no participó en clara muestra de enojo de la AFA con la FIFA, envió a Guillermo Stábile, DT de la selección en ese momento para que observe todos los partidos. El entrenador realizó varios apuntes en los que no adhería a la ferviente idea de la táctica de los europeos y prefería las condiciones naturales, que según él, la de los argentinos eran magníficas. Buscaba un equilibrio entre lo útil y lo vistosos. Agregó que Hungría era el mejor aunque no eran fenómenos del fútbol y que si su selección hubiera acudido, habría hecho una tarea destacada.
La copa del mundo tuvo récord de países inscriptos (16 clasificaron, 38 participaron sólo de Eliminatorias) y ya era llamada Jules Rimet. España se quedó afuera de la competición por un misterio que aún no se resolvió. Había empatado en un repechaje con Turquía y debían jugar un tercer partido definitorio. Kubala era la figura de los gallegos, pero era húngaro, entonces un telegrama desde la FIFA (después nunca se supo qué dirigente había sido) prohibió su inclusión en el partido decisivo. Tras el empate 2-2 en estadio neutro, por sorteo clasificaron los euro-asiáticos.
Hungría era el gran candidato y según dicen, de los mejores equipos que se hayan visto alguna vez. Había arrasado en los Juegos Olímpicos de Helsinki y después había humillado a Inglaterra en Wembley. Tácticamente retrasó a su centrodelantero y a su puntero y adelantó a sus volantes (Kocsis, Puskas). Entre los cuatro conformaron el cuadrado mágico. El goleador de la competición, apodado Cabecita de Oro por su fuerte cabezazo gritó 75 veces en 68 partidos.
Le ganó a Corea nueve a cero y en cada gol de los europeos, los orientales inclinaban su cabeza en reverencia a los mejores. Al partido siguiente le ganó 8-3 a Alemania que dando por perdido el partido había puesto cinco suplentes; Ferenc Puskas terminó lesionado y por eso no pudo jugar cuartos y semifinales. En cuartos sin su gran figura, triunfó ante Brasil en la Batalla de Berna, por 4-2 en uno de los partidos más violentos de la historia. Hubo 42 infracciones, 2 penales y 3 expulsiones, los hinchas se enfrentaron con la policía y los jugadores se enfrentaron camino a vestuario a las piñas, aunque no hubo sancionados. Para la semifinal enfrentó a Uruguay en “el más bello espectáculo futbolístico que vieron los tiempos” según dijo The Manchester Guardian. Ganaban los húngaros dos a cero pero, dos goles del argentino Hohberg empataron las acciones y las llevaron a suplementario. Kocsis con un doblete olvidó rápido las aspiraciones sudamericanas y a diferencia del partido anterior, los jugadores terminaron llorando de emoción y felicitándose unos a otros por el gran partido que habían jugado.
Por el otro bando aparecía una humilde Alemania que se recuperaba de la guerra y quería volver a ser un país “normal”. Contaba con Herberger, un jugador experimentado pre-guerra y con gran poder de persuasión, sirviéndoles de ejemplo a sus compañeros, según Glanville analizó en Historia de la Copa del Mundo. Además estaban Walter y Rahn, dos jugadores decisivos en la final. Pasó la primera ronda tras ganar en desempate a Turquía, luego eliminó a Yugoslavia tras ganarle por 2-0 pero merecer claramente perder, según dijeron periodistas. En semifinales vapuleó a Austria con un cómodo 6-1.
Hungría era gran favorita para la final y más cuando a los diez minutos ganaba dos a cero. La pesadez del campo por la lluvia y la ventaja física que pudieron sacar quienes perdían, emparejó las cosas. Morlock descontó y Rahn hizo dos para un final de película. “Nos dormimos y cuando nos despertamos, perdíamos tres a dos” fue la mejor explicación que pudo dar un jugador ante la milagrosa remontada germana. Puskas agregó “fuimos los mejores pero ellos los más inteligentes”. RELACIONADO: Video FIFA 1 - Video FIFA 2 - Más videos - Mundial de Uruguay 1930 - Mundial de Italia 1934 - Mundial de Francia 1938 - Mundial de Brasil 1950 - Curiosidad Mundial 1954
Principales fuentes: El Libro de Oro del Mundial, Clarín; Argentina en los Mundiales, Sergio Ferraro, Sudamericana; El Fútbol a Sol y Sombra, Eduardo Galeano, Catálogos; FIFA.com. Imagenes: FIFA
3 comentarios:
si jugamos, lo ganabamos nosotros
modo porteño off
Pedro, para cuando algo de Redondo?
Tu nuevo visitador frecuente,
Nacho Ibarra
Con respecto a tu enlace en Abran Cancha.
"Como le he dicho a otros lectores, cuando cambiamos el diseño perdimos casi 200 links, hoy solo tenemos unos 198, y estamos tratando de recuperarlos. Ahora mismo volvemos a enlazar tu sitio".
OJO, Igual tu link estaba en la sección "Fútbol Argentino".
Aquí: http://abran-cancha.blogspot.com/search/label/Links%20f%C3%BAtbol%20argentino
cualquier cosa me dices.
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