Sudáfrica le abría las muertas al mundo. Con la inauguración y con su partido, que sería el primero del mundial 2010. Enfrente estuvo México, la selección de Javier Aguirre que, en los planes debía llevárselo puesto al local, de mucha entrega, aunque de dudosa calidad.
El comienzo, fue tal vez lo más cercano al pronóstico. Errores defensivos africanos, los delanteros mexicanos con varias chances cada uno y mostrando un nivel bastante alto, aunque por desgracia para ellos, duró muy poco.
Guillermo Franco erró dos cabezazos, Giovani dos Santos un zurdazo y Vela lanzó un centro-remate que también se fue desviado. Los anuncios de los locales llegaron sobre el final de la primera etapa cuando con algo de Pienaar, pivoteos de Mphela o proyecciones de Tshalabala logró inquietar a una defensa (y un arquero) bastante inseguros.
Los segundos cuarenta y cinco tuvieron más emociones. Fue más parejo, Sudáfrica más adelantado y decidido a ganar, mientras que México ya no tenía la misma claridad con la pelota, era muy pobre en ofensiva -con excepción de Gio Dos Santos- y la línea de tres centrales atrás sufría con muy poco.
Entre tres o cuatro Bafana-Bafana hilvanaron una gran jugada en mitad de campo y la pelota le quedó a Mphela, que se la puso en el lugar exacto a Tshbalala, quien llegó por la izquierda y con un zurdazo terrible, la clavó en el ángulo para el primer gol del torneo. Bailecito de los jugadores y griterío de las noventa mil almas del Soccer City y otras cuantas fuera del mismo.
Parecía que se le venía el mundo abajo a los mariachi. Ingresaron Andrés Guardado, Cuathemoc Blanco y Chicharito Hernández en busca de romper el molde, aunque ninguno de esos tres fue decisivo en el resultado. Tras una pelota parada, salió toda la defensa sudafricana, con excepción de Mokoena, el capitán que se quedó adentro del área habilitando a tres mexicanos. Uno de ellos, Rafa Márquez, el experimentado hombre del Barcelona que se despide de la selección en Sudáfrica, la paró y definió al primer palo de Khune para el gol del empate que sería definitivo y convertir dos goles consecutivos de su selección en dos mundiales diferentes.
Mphela tuvo una contra, pero el palo le dijo que no. Ingresó Parker por Pienaar que fundió en el segundo tiempo (a los 45 entró Masilela). Fue uno a uno, con buen sabor para los dos: los de Parreira se quedan con la sensación de estar a la altura de un equipo ya armado y candidato del grupo y los de Aguirre, porque consiguieron el gol en un momento complicado y a pesar de ir perdiendo, pudieron rescatar un punto.
El comienzo, fue tal vez lo más cercano al pronóstico. Errores defensivos africanos, los delanteros mexicanos con varias chances cada uno y mostrando un nivel bastante alto, aunque por desgracia para ellos, duró muy poco.
Guillermo Franco erró dos cabezazos, Giovani dos Santos un zurdazo y Vela lanzó un centro-remate que también se fue desviado. Los anuncios de los locales llegaron sobre el final de la primera etapa cuando con algo de Pienaar, pivoteos de Mphela o proyecciones de Tshalabala logró inquietar a una defensa (y un arquero) bastante inseguros.
Los segundos cuarenta y cinco tuvieron más emociones. Fue más parejo, Sudáfrica más adelantado y decidido a ganar, mientras que México ya no tenía la misma claridad con la pelota, era muy pobre en ofensiva -con excepción de Gio Dos Santos- y la línea de tres centrales atrás sufría con muy poco.
Entre tres o cuatro Bafana-Bafana hilvanaron una gran jugada en mitad de campo y la pelota le quedó a Mphela, que se la puso en el lugar exacto a Tshbalala, quien llegó por la izquierda y con un zurdazo terrible, la clavó en el ángulo para el primer gol del torneo. Bailecito de los jugadores y griterío de las noventa mil almas del Soccer City y otras cuantas fuera del mismo.
Parecía que se le venía el mundo abajo a los mariachi. Ingresaron Andrés Guardado, Cuathemoc Blanco y Chicharito Hernández en busca de romper el molde, aunque ninguno de esos tres fue decisivo en el resultado. Tras una pelota parada, salió toda la defensa sudafricana, con excepción de Mokoena, el capitán que se quedó adentro del área habilitando a tres mexicanos. Uno de ellos, Rafa Márquez, el experimentado hombre del Barcelona que se despide de la selección en Sudáfrica, la paró y definió al primer palo de Khune para el gol del empate que sería definitivo y convertir dos goles consecutivos de su selección en dos mundiales diferentes.
Mphela tuvo una contra, pero el palo le dijo que no. Ingresó Parker por Pienaar que fundió en el segundo tiempo (a los 45 entró Masilela). Fue uno a uno, con buen sabor para los dos: los de Parreira se quedan con la sensación de estar a la altura de un equipo ya armado y candidato del grupo y los de Aguirre, porque consiguieron el gol en un momento complicado y a pesar de ir perdiendo, pudieron rescatar un punto.
El segundo turno, en Ciudad del Cabo, fue para Francia y Uruguay, que completaron el grupo A, en el Green Point. El partido comenzó tranquilo con ambos cuidadosos, mirando más al rival que buscando marcar la diferencia por su cuenta.
Luego llegaron varias situaciones interesantes: un tiro libre para Francia, otra en la que Guvou no pudo definir bien mientras que Forlán tuvo la suya para Uruguay. Pero, las cosas buenas se acabaron ahí, llegaron muchos centros, pelotas luchadas en el mediocampo, Anelka retrocediendo, Suárez todo el tiempo en offside.
El buen inicio quedó en historia y las imágenes del segundo tiempo que quedan son dos remates desde afuera: Toulalan débil para Muslera y Ribery que no la pudo agarrar bien tras un tiro libre jugado rápido. Forlán volvió a tener una nueva oportunidad, esta vez más clara todavía, pero no quería entrar.
Ni Domenech ni Tabárez se mostraron muy decididos en atacar: Henry, Lodeiro, Abreu y Malouda ingresaron aunque con la salida de jugadores ofensivos. Lo peor de todo fue que a los veinte minutos de haber ingresado, Nicolás Lodeiro, el habilidoso jugador del Ajax se pasó de rosca y se ganó la segunda amarilla por un terrible patadón a Sagna. El joven después no sabía donde meterse, porque pecó de inexperimentado, pero perjudicó a su equipo que tras eso, dejó de tener en mente llevarse los tres puntos.
Uruguay se reordenó y la línea de tres se transformó en cuatro (Victorino, Godín, Lugano y Álvaro Pereira), el mediocampo quedó con Eguren –que reemplazó a Diego Pérez-, Ríos y Pereira –que se cambió de punta- y los dos puntas arriba. Una mano de Victorino dentro del área que el árbitro japonés no cobró, quedará en el archivo. Luego, un discutido tiro libre en el que había habido infracción, que Henry desvió en la cabeza de Abreu.
Fue empate a cero, que le queda un poco mejor a Uruguay, que pudo aguantar con uno menos sobre el final. De todas maneras, ambos aburrieron y deberán corregir muchas cosas en ataque. El Grupo de la Muerte, casi nos mata de embole, pero con dos partidos más para cada uno, no quedan dudas que será duro de sobrepasar.
TÁCTICA: Sudáfrica salió a esperar a México y así se dio durante gran parte del partido. La idea fue muy buena, aunque se salvó varias veces por el arquero y malas definiciones mexicanas. México, necesitó un compañero de Giovani dos Santos para la creación y a pesar de plantarse en campo contrario, le faltó volumen. Vela, un jugador a tener en cuenta, fue una sombra y tal vez estuvo demasiado tiempo en cancha.
Francia no tuvo ideas para jugar ni romper el duro mediocampo uruguayo. A pesar de tener que defenderse de dos delanteros muy complicados, por momentos le sobró un defensor, mientras que notó el ingreso de un mediocampista izquierdo nato como Malouda, quien con dos o tres corridas mostró que merece un lugar. Más allá de buscarlo en el final, necesitó tener uno más para arriesgar; los cambios que eran buena oportunidad de ello, no lo fueron. Uruguay se plantó de contraataque y buscó en González el conector hacia Forlán y Suárez. Ni el delantero del Ajax ni el enganche estuvieron en un buen día y el equipo no tuvo la pelota.
LA PERLITA: La inauguración versión show fue en el Soccer City de Johannesburgo antes del primer partido. Nada muy nuevo en la apertura del Mundial que combinó mucho color y una apertura que pone la piel de gallina siempre, al ver que comienza el Mundial. Más de 1500 personas en escena, aviones en vuelo acrobático y la mención de las nueve sedes, de todos los clasificados y participantes de eliminatorias y un homenaje a los africanos. “Bienvenidos a nuestra casa en Africa” fue el lema del show. Por último quedó un video mostrando hinchas felices o tristes y el baile de Shakira y su Waka-Waka. Lo único malo: no estuvo Nelson Mandela por la muerte de su bisnieta ayer por la noche en un accidente automovilístico.
EL DATO: Rafael Márquez con su gol del empate llegó a un lindo récord: marcó los últimos dos goles de México en Mundiales diferentes a pesar de ser defensor
Luego llegaron varias situaciones interesantes: un tiro libre para Francia, otra en la que Guvou no pudo definir bien mientras que Forlán tuvo la suya para Uruguay. Pero, las cosas buenas se acabaron ahí, llegaron muchos centros, pelotas luchadas en el mediocampo, Anelka retrocediendo, Suárez todo el tiempo en offside.
El buen inicio quedó en historia y las imágenes del segundo tiempo que quedan son dos remates desde afuera: Toulalan débil para Muslera y Ribery que no la pudo agarrar bien tras un tiro libre jugado rápido. Forlán volvió a tener una nueva oportunidad, esta vez más clara todavía, pero no quería entrar.
Ni Domenech ni Tabárez se mostraron muy decididos en atacar: Henry, Lodeiro, Abreu y Malouda ingresaron aunque con la salida de jugadores ofensivos. Lo peor de todo fue que a los veinte minutos de haber ingresado, Nicolás Lodeiro, el habilidoso jugador del Ajax se pasó de rosca y se ganó la segunda amarilla por un terrible patadón a Sagna. El joven después no sabía donde meterse, porque pecó de inexperimentado, pero perjudicó a su equipo que tras eso, dejó de tener en mente llevarse los tres puntos.
Uruguay se reordenó y la línea de tres se transformó en cuatro (Victorino, Godín, Lugano y Álvaro Pereira), el mediocampo quedó con Eguren –que reemplazó a Diego Pérez-, Ríos y Pereira –que se cambió de punta- y los dos puntas arriba. Una mano de Victorino dentro del área que el árbitro japonés no cobró, quedará en el archivo. Luego, un discutido tiro libre en el que había habido infracción, que Henry desvió en la cabeza de Abreu.
Fue empate a cero, que le queda un poco mejor a Uruguay, que pudo aguantar con uno menos sobre el final. De todas maneras, ambos aburrieron y deberán corregir muchas cosas en ataque. El Grupo de la Muerte, casi nos mata de embole, pero con dos partidos más para cada uno, no quedan dudas que será duro de sobrepasar.
TÁCTICA: Sudáfrica salió a esperar a México y así se dio durante gran parte del partido. La idea fue muy buena, aunque se salvó varias veces por el arquero y malas definiciones mexicanas. México, necesitó un compañero de Giovani dos Santos para la creación y a pesar de plantarse en campo contrario, le faltó volumen. Vela, un jugador a tener en cuenta, fue una sombra y tal vez estuvo demasiado tiempo en cancha.
Francia no tuvo ideas para jugar ni romper el duro mediocampo uruguayo. A pesar de tener que defenderse de dos delanteros muy complicados, por momentos le sobró un defensor, mientras que notó el ingreso de un mediocampista izquierdo nato como Malouda, quien con dos o tres corridas mostró que merece un lugar. Más allá de buscarlo en el final, necesitó tener uno más para arriesgar; los cambios que eran buena oportunidad de ello, no lo fueron. Uruguay se plantó de contraataque y buscó en González el conector hacia Forlán y Suárez. Ni el delantero del Ajax ni el enganche estuvieron en un buen día y el equipo no tuvo la pelota.
LA PERLITA: La inauguración versión show fue en el Soccer City de Johannesburgo antes del primer partido. Nada muy nuevo en la apertura del Mundial que combinó mucho color y una apertura que pone la piel de gallina siempre, al ver que comienza el Mundial. Más de 1500 personas en escena, aviones en vuelo acrobático y la mención de las nueve sedes, de todos los clasificados y participantes de eliminatorias y un homenaje a los africanos. “Bienvenidos a nuestra casa en Africa” fue el lema del show. Por último quedó un video mostrando hinchas felices o tristes y el baile de Shakira y su Waka-Waka. Lo único malo: no estuvo Nelson Mandela por la muerte de su bisnieta ayer por la noche en un accidente automovilístico.
EL DATO: Rafael Márquez con su gol del empate llegó a un lindo récord: marcó los últimos dos goles de México en Mundiales diferentes a pesar de ser defensor
ARGENTINA: A un día del partido la formación está más que clara: Romero, Demichelis, Samuel, Heinze, Jonás, Mascherano, Verón, Di María, Messi, Tevez e Higuaín. Cruce de palabras entre Luis Fabiano y Verón, ya que el brasilero llamó a los argentinos “amargos”. Kanu dijo que ganarán y el presidente de la federación de fútbol nigeriano admitió que un empresario ofreció un millón de dólares de premio a los jugadores como premio si ganan.
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