miércoles, 5 de noviembre de 2008

Crónica de un goleador histórico


Desde que volvió este torneo, su equipo es realmente otro, cambió desde su forma de jugar hasta de ganar. Encontró al hombre gol, mejor que nunca, más pibe que nunca, con más ganas que nunca. Sí, el Bichi Fuertes está como nunca.

Su debut fue a los 36 minutos del segundo tiempo en la tercera fecha contra Central. Pocos le tenían fe, siguió ingresando dos fechas más y en el 3-3 vs. Lanús jugó su primer partido como titular en el 2008 marcando un gol.

Terminó dolorido y volvió a la suplencia, eso le duró un partido, porque de ahí en adelante, se recuperó el puesto. Primero con Valdemarín, pero después de la gran tarea de Rubén Ramírez ese día, se confirmó el romance.

Otro gol a Huracán, uno a Independiente de penal para no perder la costumbre de tenerlo de hijo, contra Vélez, permitió los goles de otros y cuifó la garganta.

Claro, la fecha entre semana lo tenía descuidado. Facturó por triplicado frente a Argentinos y siguió su festejo gracias al gol del empate vs. San Martín en Tucumán. Bien podría ir primero este equipo con este jugador encendido de tal manera, pero basta con decir que está séptimo para justificar su gran nivel.

No está en la sección semanal Números de delanteros, porque está su compañero Rubén Ramírez, aunque bien valdría aparecer y porque sería un afano, ya que en efectividad le gana a cualquiera.

Muy valorable lo de este “viejito” piola que consiguió el mejor medicamento para recuperarse de los ligamentos: los goles, su media naranja.


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Lo que al fútbol le gusta (nota vieja, que recién recuerdo con una parte de Franzoia): En busca del terreno perdido

1 comentario:

Marco dijo...

El Bichi Fuertes hizo un periplo poco comín en el fútbol profesional. Si bien no es lo que podemos llamar un sutil sorprende lo que sabe de táctica y estrategia este muchacho.

Saludos.

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