Mientras los brasileños se ilusionan y comienzan (Inter, ganó ayer, hoy debutan Flamengo y Corinthians) su sueño internacional con grandes figuras y la torcida desesperada por lograr el tan ansiado título, hubo un equipo argentino que ganó, tiene puntaje ideal y es candidato.
Vélez se iba hasta Venezuela para jugar contra el más flojo del grupo: Deportivo Italia. Este con 0 puntos, y Vélez con 3 (gracias al 2-0 obtenido contra Cruzeiro) se disputaban si las cosas se alejaban demasiado o si se emparejaban.
El local se dejó intimidar, dejó en claro que su rival era más grande y tomó el puesto de dominado. El otro equipo, agradecido, aceptó el balón pero no desniveló: muy pacientemente, jugó a media máquina. Así transcurrió el PT, con Vélez intentando crear situaciones, pero Deportivo Italia marcaba bien. Una defensa sólida, mediocampo distribuidor y delantera creativa hacían que el visitante se sintiera en su cancha, sin contar la inexistente presión rival en su delantera.
Durante todo el partido El Fortín tuvo problemas aéreos defensivos, a tal punto que se le generaron 4 cabezazos (controlados no sin esfuerzo por Montoya o desviados). Aparte de estos, no sufrió ofensiva rival.
Ya en el ST Vélez seguía buscando pero muy tranquilo, y luego de un córner envenenado Hernán Rodrigo López encontró un rebote y marcó el 1-0 que le dio un respiro a su equipo. A partir de ahí las cosas mejoraron, ya que un equipo como aquel no se podía dar el lujo de perder ante el más flojo del grupo. No estuvo tranquilo nunca, sin embargo. Debería haber hecho dos o tres goles más pero el arquero del local tapó pelotas hasta cansarse: Silva, Moralez, Somoza, todos terminaban sus disparos agarrándose la cabeza. La mala fortuna perjudicó al equipo argentino, también. Cabrera tiró un mano a mano por arriba.
Cuando entró Martínez Vélez tuvo más juego y atacó más por las bandas.
Así culminó un partido sufrido por los de Gareca hasta el último minuto, pero que terminó con sonrisas.
El local se dejó intimidar, dejó en claro que su rival era más grande y tomó el puesto de dominado. El otro equipo, agradecido, aceptó el balón pero no desniveló: muy pacientemente, jugó a media máquina. Así transcurrió el PT, con Vélez intentando crear situaciones, pero Deportivo Italia marcaba bien. Una defensa sólida, mediocampo distribuidor y delantera creativa hacían que el visitante se sintiera en su cancha, sin contar la inexistente presión rival en su delantera.
Durante todo el partido El Fortín tuvo problemas aéreos defensivos, a tal punto que se le generaron 4 cabezazos (controlados no sin esfuerzo por Montoya o desviados). Aparte de estos, no sufrió ofensiva rival.
Ya en el ST Vélez seguía buscando pero muy tranquilo, y luego de un córner envenenado Hernán Rodrigo López encontró un rebote y marcó el 1-0 que le dio un respiro a su equipo. A partir de ahí las cosas mejoraron, ya que un equipo como aquel no se podía dar el lujo de perder ante el más flojo del grupo. No estuvo tranquilo nunca, sin embargo. Debería haber hecho dos o tres goles más pero el arquero del local tapó pelotas hasta cansarse: Silva, Moralez, Somoza, todos terminaban sus disparos agarrándose la cabeza. La mala fortuna perjudicó al equipo argentino, también. Cabrera tiró un mano a mano por arriba.
Cuando entró Martínez Vélez tuvo más juego y atacó más por las bandas.
Así culminó un partido sufrido por los de Gareca hasta el último minuto, pero que terminó con sonrisas.
Lanús viajó a Bolivia para jugar con Blooming, quién lo acompañaba en el último lugar de su grupo. Empezó desorientado, atontado. Blooming, no acostumbrado a dominar, era tosco pero presionaba, hasta que un tiro de Vieira al ángulo agarró a Marchesín desprevenido, y dejó al Granate peor que nunca. Se entreveía otro de estos nuevos partidos de Lanús en los que nos sorprende.
Sin embargo, Blooming no supo aprovechar esto. Siendo un equipo flojo, dejaba a Blanco, una de las figuras del partido, sin marca, y en una de esas se la dio a Velázquez y este se la devolvió. De cabeza, Blanco marcó el 1-1. A partir de ahí se empezó a soñar con una victoria. El local dejó de presionar y se limitó a ser dominado. Terminando el PT, Velázquez tiró el centro y esta vez fue Salcedo quien metió el gol. El cambio de Castillejos por Lagos fue positivo, ya que el titular estaba haciendo un muy mal partido y se buscaba precisión para definirlo. Eso fue exactamente lo que se encontró: Lagos hizo 2 goles más: uno de rebote, y uno muy bueno, enganchando, cruzándola y dejándola en el ángulo.
Lanús volvió a ver la victoria y ya sueña con una remontada.
Sin embargo, Blooming no supo aprovechar esto. Siendo un equipo flojo, dejaba a Blanco, una de las figuras del partido, sin marca, y en una de esas se la dio a Velázquez y este se la devolvió. De cabeza, Blanco marcó el 1-1. A partir de ahí se empezó a soñar con una victoria. El local dejó de presionar y se limitó a ser dominado. Terminando el PT, Velázquez tiró el centro y esta vez fue Salcedo quien metió el gol. El cambio de Castillejos por Lagos fue positivo, ya que el titular estaba haciendo un muy mal partido y se buscaba precisión para definirlo. Eso fue exactamente lo que se encontró: Lagos hizo 2 goles más: uno de rebote, y uno muy bueno, enganchando, cruzándola y dejándola en el ángulo.
Lanús volvió a ver la victoria y ya sueña con una remontada.
*Las estadísticas no incluye los partidos del jueves
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