El 16 de junio de 1938 se enfrentaron, en Marsella, Italia y Brasil por las semifinales del Mundial de Francia. El equipo brasileño se perfilaba como gran candidato a llevarse la copa, mientras que su rival, no sólo era el defensor del título sino uno de los más serios aspirantes a quedarse con el campeonato.
Para este partido Pimienta director técnico de Brasil reservo al gran centrodelantero Leónidas y máximo goleador del torneo para una final que ellos creían segura. Pero ese exceso de confianza del DT fue un error fatal porque sintió la falta del delantero e Italia los eliminó al vencer por 2 a 1 con goles de Gino Colaussi y Giusseppe Meazza.
Los brasileños tuvieron el consuelo al derrotar a Suecia por 4-2 (dos goles de Leónidas) por el tercer puesto, luego de estar en desventaja por dos goles. Mientras que los italianos lograron un triunfo ante Hungría por 4-2, y se clasificaron campeones por segunda vez consecutiva.
Para este partido Pimienta director técnico de Brasil reservo al gran centrodelantero Leónidas y máximo goleador del torneo para una final que ellos creían segura. Pero ese exceso de confianza del DT fue un error fatal porque sintió la falta del delantero e Italia los eliminó al vencer por 2 a 1 con goles de Gino Colaussi y Giusseppe Meazza.
Los brasileños tuvieron el consuelo al derrotar a Suecia por 4-2 (dos goles de Leónidas) por el tercer puesto, luego de estar en desventaja por dos goles. Mientras que los italianos lograron un triunfo ante Hungría por 4-2, y se clasificaron campeones por segunda vez consecutiva.
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1 comentario:
Reservar un jugador, que locura, así les fue
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