Boca encontró rápidamente un camino muy fácil para llegar al área rival que se lograba con tirar la pelota larga para el pique de Rodrigo Palacio, imparable para el chico Damián Pérez. De esa manera el equipo de Carlos Ischia se hizo dueño del partido. Llegó primero a los 3 minutos con un cabezazo de Palermo que Cuenca controló en dos tiempos y a los 8 el que cabeceó fue Battaglia pero fue débil y contenido nuevamente por el arquero. Arsenal empezó a aparecer a través de Alejandro Gómez, que jugó un gran partido, sobre todo cuando se encontraba sobre la izquierda. Y tuvo una buena oportunidad, cuando Carrera aprovechó un rechazo corto de Morel y remató apenas alto. Mientras que Boca seguía ganando en la mitad de la cancha y su rival se iba llenando de infracciones, algunas sancionadas y otras no. El gol, que se veía venir, llegó en el minuto 20 tras un penal de Casteglione a Dátolo, otro de los de buen nivel. Cuenca tapó el remate de Palermo, y tardo en reaccionar para agarrar el rebote que fue tomado por el máximo goleador de Boca que no falló. Era todo de Boca, hasta que en el minuto 25 hubo un grave error de Ibarra, que se quedó parado para dejar salir la pelota y dejar que Gómez sacara un centro para que Sava, de cabeza, igualara el partido. Boca se desordenó y por primera vez Arsenal encontró la pelota. Pero en el mejor momento del equipo de Sarandí, Dátolo armó una buena jugada por izquierda, metió un centro por abajo en el área chica y Palacio solo la empujó al segundo palo poniendo el 2-1 a los 31 minutos.
En el inicio de la segunda etapa Arsenal salió más decidido y agresivo, ganó la pelota en la zona de los volantes y aprovechó los huecos de Boca para llevar el juego cerca del arco de Caranta. Sin embargo, no tuvo claridad, sus jugadores no se encontraban y así fue que no tuvo muchas oportunidades claras, salvo un remate de 40 metros de Pérez que se fue apenas alto y otro de Carrera desde posición muy cerrada que se fue desviado por poco. Boca, pudo haber aumentado en un contragolpe que resolvió mal Palacio rematando recto a las manos del arquero Campestrini. En la última media hora Arsenal se quedó sin piernas y Boca toco en el medio para dejar pasar los minutos, apoyándose en Battaglia y en la habilidad de Dátolo. Palermo estuvo cerca a los 34 cuando Campestrini le sacó un gran cabezazo. Y cuando parecía que el partido terminaba, a los 44 minutos, Battaglia se encontró con una pelota perdida abajo del arco, después de un corner, y con un remate seco y a colocar marcó el tercero para los xeneizes.
Para Palermo, que metió el gol de rebote luego de fallar el penal, significó el gol N° 194 con la camiseta de Boca, cifra que lo ubica como máximo anotador de la historia del club, junto con Francisco “Pancho” Varallo.
Con la necesidad de un título, la final de la Recopa es la oportunidad ideal que tiene Boca para saldar la deuda en un 2008 hasta aquí sin alegrías. Pero Arsenal intentará impedirlo y así obtener el tercer trofeo internacional de su corta historia en menos de un año.
Este trofeo se disputa desde 1989 entre los campeones de las dos competencias más importantes a nivel continental. Boca es el equipo que más veces lo ganó: 1990, 2005 y 2006. Arsenal, por su parte, viene de obtener a fines de julio otro trofeo, al ganar en Japón la Copa Suruga Bank ante el local Gamba Osaka.
Dentro de dos semanas (27 de agosto, a las 20:00) se enfrentarán nuevamente en La Bombonera y Boca necesitará de muy poco para levantar otra copa internacional, ya que hasta perdiendo 2-0 será campeón.
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