Frases futboleras XXI

“Mi visión del fútbol italiano y español es muy personal. Siempre dije que en España se juega a ganar y en Italia a no perder.”
Zamorano

“El placer de los brasileños es golearte. Tal vez el nuestro sea la cargada, vamos 3 a 0 y paramos. Pero si ellos te pueden hacer ocho, diez goles, te los hacen. Humillan goleando. Nosotros cargando y si es uno a cero mejor.”
Perfumo

“Yo dirijo los planteles fáciles. Un palo y un caramelo.”
Lorenzo

“Hasta que uno no alcanza una consagración, la persigue afanosamente, pero yo he sentido una sensación de vacío el día que me tocó salir campeón. Me puse a pensar ¿Y ahora que?
Tabárez

“No hay que morir con la de uno, hay que vivir con la de uno. Y vivir es cambiar.”
Perfumo

“La táctica es un punto de partida, pero no es la solución a todos los problemas de los equipos de fútbol. Soy un convencido de que los equipos empiezan no son los que terminan. Uno empieza de forma y después al equipo que lo terminan de delinear los jugadores. El entrenador tiene que tener la capacidad de encontrar ese sustento, que es la táctica, para que ellos rindan en plenitud.”
Alfaro

“Puede haber un jugador, un periodista o un dirigente tonto, pero un técnico no, porque se los come el miedo.”
Solari

“Si el presidente que contrata y me echa a las dos fechas, tiene que irse él, porque se equivocó feo con la elección.”
Solari

“Los entrenadores trabajamos tácticamente con el jugador, pero la impronta la tienen que poner ellos. ES lo que pasaba con Alberto Olmedo, le daban el argumento y él después inventaba.”
J.J. López

“En fútbol no hay recetas que garanticen el éxito ni medidas para prevenir el fracaso.”
Alfaro

“Yo desde adentro de la cancha manejaba todo. En River me masajeaba más la garganta que las piernas, pero cuando como técnico me paré por primera vez frente a un plantel, no sabía que decirle.”
Perfumo

“Siempre discrepé con elegir al mejor jugador. Porque Maradona y Pelé no atajaban mejor que Mazurkiewicz, no cerraban mejor que Pavón, ni cabeceaban mejor que Santillana.”
Garisto

“Hice ocho goles nomás porque cuando llegaba al borde del área para pegarle, no pensaba en el gol, temía que rebotara la pelota y viniera el contragolpe.”
Astrada